1.- Después de Belleza roja esta esta es tu segunda incursión en el género de novela negra, por lo que algunos medios te han definido ya como “La nueva dama del crimen en castellano”. ¿Cómo recibes este apelativo?
Me parece bien que los editores y la crítica utilicen etiquetas para que el lector te ubique y sepa lo que va a encontrar en tu obra, pero no son más que eso: etiquetas. Más allá de eso, lo que soy es simplemente una escritora con ganas de contar historias. Y, además, ni soy nueva ni soy dama, así que no puedo más que recibir el apelativo con humor.
2.- Creo que uno de los mayores aciertos de la novela radica en el paralelismo entre los dos casos investigados, el de Catalina Fiz y el de Úrsula Bas. ¿Te planteaste la estructura de la novela desde el principio transitando por ambos en paralelo?
Si, la historia de una es la historia de la otra. No se entienden por separado.
3.- Has conseguido en esta novela crear dudas en el lector sobre todos. Es decir, consigues que el lector llegue a sospechar de todo el mundo, lo cual es muy complejo dadas las bifurcaciones que tiene la investigación y las subtramas. ¿Era algo que trabajaste de forma específica para aumentar la tensión narrativa?
La historia está toda en mi cabeza desde el inicio. Lo que más me preocupa es el ritmo de la novela. La dosificación de la información de manera que el lector no decaiga en su interés. Es un difícil equilibrio, en el que, como en la pesca, sueltas el hilo para mantener el interés, pero no demasiado, para que no se resuelva el caso demasiado pronto.
4.-La vida secreta de Úrsula Bas está situada en Galicia. ¿Has elegido ese escenario para dotarlo de mayor idiosincrasia y poder definir mejor el carácter de sus personajes, o crees que la trama podría estar situada en cualquier otro lugar de España o del mundo?
Yo creo que todos los temas de mis personajes, la crisis vital de Úrsula, los miedos, la culpa, las inseguridades, son muy universales, en ese sentido podrían suceder en cualquier sitio. Pero no puedo negar que es un noir muy gallego, muy de Compostela, porque necesito que mis personajes respiren mi aire y caminen por donde yo camino. Siempre lo achaco a la falta de imaginación, jajajaja.
5.-Uno de los protagonistas, Santi Abad llega al lector con un pasado duro y que, desde cierto punto de vista, sería difícil de perdonar. Sin embargo, desde el minuto uno, yo, como lectoral menos, lo acepto como protagonista y empatizo en cierto modo con él. Es algo que me parece sumamente complejo. ¿Nos podrías contar un poco cómo has acometido la justificación o explicación de ese pasado?
Bueno, es muy complejo tratar con un personaje con una conducta tan injustificable y desde luego no hay ánimo de redención. La lectura que hago es que somos capaces de empatizar con algo que a priori no es absolutamente rechazable. Y en ese punto, tenemos que hacérnoslo mirar. Y no digo que no haya posibilidad de redención ni de rehabilitación en general, pero es cierto que interpelo a los lectores que justifican a Abad para que hagan un examen de conciencia. ¿Qué tiene Abad que me hace justificarlo? La respuesta está en el hecho de que es consciente de que él es el responsable de sus demonios y esto no es común en una sociedad en laque nadie asume nunca sus culpas. Me sirve este personaje para que todos reflexionemos sobre el problema y sobre las formas de encararlo.
6.- De Ana Barroso, la subinspectora protagonista, me gusta sobre todo su lucha por defender su lugar en igualdad de condiciones con sus compañeros varones. ¿Has querido apoyar la defensa de la igualdad de derechos de la mujer a través de este personaje?
Siempre. Ser mujer lleva siempre un plus de exigencia asociado. Ana es madre soltera y sobrevive un mundo de hombres. Frecuentemente la someten a juicios que en nada tienen que ver con su valía profesional. Eso nos pasa a todas, seamos policías, amas de casa, cirujanas, dependientas o abogadas. Es solo una muestra de a lo que nos enfrentamos cada día.
7.- Tu carrera como escritora ha sido un ejemplo para muchos, desde tu primera novela, pasando luego por el éxito de Deje su mensaje después de la señal, traducido a varios idiomas y llevado al teatro con gran éxito. Luego el éxito arrollador de Belleza roja y ahora el triunfo de la presente novela. ¿Cómo has asimilado este éxito tan rápido obtenido en tan poco tiempo?
No he asimilado nada. El éxito es un concepto demasiado relativo como para enfrentarse a él. Lo único en lo que pienso es en la siguiente novela, en encontrar historias nuevas que muestren mi visión del mundo. Me sigo emocionando con cada mensaje de cada lector.
8.- Abad y Barroso nos ofrecen aquí su segundo caso, después de su aparición en Belleza Roja. Intuimos que la serie continuará. ¿Será así? ¿Puedes adelantarnos algo del siguiente caso? ¿Se cerrará con una tercera en forma de trilogía?
No planifico mucho. Ellos me encantan y el asesinato es siempre una excusa perfecta para entrar en las mentes de los personajes. No sé si habrá otro o no. Y desde luego nunca he hablado de trilogía en la medida que los libros son autoconclusivos. Me gusta más ese hashtag que mis lectores han puesto en circulación. Nos limitaremos, de hacerlo, a continuar con #MásAbadyBarroso
9.- Quiero darte la enhorabuena por el final. La verdad es que conforme vas llegando a él es complicado imaginar el desenlace y el que nos ofrece la novela es totalmente inesperado, brillante. ¿Te costó mucho tramarlo o cuando comenzaste a escribirla ya sabías como terminaría?
Esto va al revés: yo tenía la historia construida y la deconstruí para vosotros, en trozos tan pequeños que no os dejaba ver el final. Mis historias son como aquellos vídeos de Art Attack en los que estás viendo tan de cerca lo que sucede que no tienes perspectiva. Solo cuando me permito abrir el plano y os enseño todo desde la distancia, tenéis de la visión completa. Me encanta sorprender.
10.- La novela termina aludiendo al tema de la soledad, algo a lo que la pandemia nos ha empujado en cierta medida. La novela terminaste de escribirla en pleno confinamiento. ¿Ha pesado para que el tema aparezca de ese modo? Por cierto que en soledad nos quedamos los lectores al terminar tu fantástica novela. ¡Queremos más!
Me faltaban dos páginas cuando se decretó el Estado de Alarma. Y yo me puse enferma. Tarde casi un mes en superar la enfermedad y escribir esas dos últimas páginas . Y asumí que era una escritora aislada y confinada escribiendo sobre una escritora en idénticas circunstancias. Fue muy aleccionador. La pandemia no me llama nada como tema literario. Es una distopía en sí misma. Gracias por la lectura y la entrevista. Nos vemos en los libros.